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El vidente Ivan Dragicevic se expresó en estos términos:

 

La Virgen vino a la luz del cielo, muy feliz y muy alegre. Nos recibió con su saludo maternal “¡Alabado sea Jesús, mis queridos hijos! Luego rezó por todos nosotros aquí y especialmente por los sacerdotes y los enfermos. Entonces la Virgen se dirigió a nosotros:

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“Incluso hoy, hijitos, los invito a mirar profundamente en sus corazones y tomar la decisión de tratar de acercarse a Dios en oración. Convertíos, queridos hijos, hijitos míos. Deja el pecado y la maldad y todo lo que se interponga en tu camino en tu camino hacia la santidad. Decídase por el amor a Dios. Gracias, hijos míos, por responder también hoy a mi llamado. "

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Nuestra Señora luego oró por la paz en el mundo y en las familias. Luego se fue con la señal de la luz y de la cruz, diciendo: “Id en paz, mis queridos hijos. "

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Después de dar el mensaje, el vidente Iván quiso subrayar las palabras “miren profundamente en sus corazones”. La Madre nos llama a cambiar, no mirar al pasado y mirar nuestras lecciones, donde Dios reside. Nuestra Señora nos invita a rechazar el pecado de nuestro corazón y todo lo que nos obstaculiza en nuestro camino hacia la santidad, hacia la paz, el bien y el amor para que podamos recibir el Espíritu Santo y las gracias que el Señor deseo de darnos. Por tanto, permanezcamos un momento en silencio y en oración ante Jesús.

Ivan Dragicevic, 23 de mayo de 2020 (Traducción de MLaure D.)